No se trata de renunciar al pasado pero si evitar que se convierta en una atadura que paraliza para disfrutar, para crecer, que no deja fluir el presente en paz. Mirar permanentemente hacia atrás e insistir y recordar todo el tiempo machacando, suele ser propio de personas que tienen miedo al presente a verse, a lo que podrían ser, a lo incierto y se aferran al pasado porque recordar lo sucedido y excusarse , les otorga seguridad, y en realidad se están perdiendo la vida misma, el hoy. El pasado ya no está, se fue, ya no volverá, no se trata de renunciar a él, sino evitar que sea una atadura para no avanzar, es aceptar lo experimentado pero soltarlo y disfrutar el hoy tomar conciencia del momento en el que se vive. Amarse a uno mismo tal y como somos, sin dejar de trabajar en ser mejores: en nuestro cuerpo en nuestra mente en nuestro corazón en nuestra alma, eso es salud, es vida. Si aún crees que no mereces seguir y te culpas o culpas por cosas del pasado, te invito a que hagas un ejercicio de perdón para ti o para quien creas que te hizo daño. Deja de juzgarte, libera, deja de culparte y culpar, la vida es una vé a vivirla debes saber que lo mereces aqui y ahora, debes saber que eres un ser maravilloso aunque aún no lo creas.
Gracias por leerme, te abrazo
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